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Energía: fresas para controlar el azúcar y las grasas

Las fresas en nuestra dieta realizan una función muy útil para controlar el azúcar y la grasa que incorpora nuestra la comida. Esta fruta juega un papel importante al ser capaz de contrarrestar la acción de la glucosa y los lípidos, que se introducen en el cuerpo a través de las comidas copiosas y ricas en grasa y carbohidratos.



Desde este punto de vista, el consumo de frutas es esencial. Investigaciones científicas recientes han descubierto que la piña ayuda a eliminar la grasa. A menudo sucede que al final de una comida, nos sentimos satisfechos y no comemos fruta. Esta acción está equivocada, y juega en contra de nuestro bienestar. De hecho, los resultados de una interesante investigación publicada en el Diario del Colegio Americano de Nutrición "mostró que la fruta tomada después de una comida juega un papel primordial en la lucha contra la acción de las grasas y azúcares, que en el largoplazo pueden causar problemas de salud como la diabetes, la obesidad y las enfermedades cardiovasculares.

En términos dietéticos son conocidos los beneficios de la fruta de temporada. En particular, las bayas rojas tienen un efecto beneficioso en el control de los efectos negativos de las comidas altas en grasa. Todo gracias al hecho de que este tipo de fruta contiene muchas moléculas, como los polifenoles, capaces de llevar a cabo un efecto anti-inflamatorio y antioxidante. Las moléculas en cuestión son capaces de ajustar la respuesta a los radicales libres, que actúan directamente sobre los distintos tipos de receptores celulares y las enzimas. Otro punto a destacar en este sentido que la piel de la fruta es buena.

El secreto es saber elegir frutas de temporada, teniendo cuidado de comer frutas de colores diferentes, para que al cuerpo no le falten los compuestos que necesita.